CON UNA PALABRA

CON UNA PALABRA

¿Cuándo fue la última vez que una palabra penetro certeramente tu corazón? ¿Cuándo fue la última vez que una palabra te hizo llorar que no podías leerla en voz alta? ¿Cuándo fue la última vez que tus lágrimas rodaron hasta caer sobre tu biblia?

Si eres como yo tal vez ha pasado tanto tiempo que ni recuerdes cuando fue esa última vez. Vivimos en un mundo en el que la palabra de Dios abunda en sobremanera que muchos están indigestados de reuniones, seminarios, congresos, células, libros, cds, radio, tv e internet (Cosas que son buenas y que nos traen el mensaje de Dios pero que por abundar tanto no valoramos) vivimos en un mundo que corre día a día que no nos da tiempo para permitir que nuestro corazón se habrá para recibir la palabra en nuestro corazón.

¿Qué hace la diferencia para que tu escojas a uno entre mil? Fue la pregunta que le hice a Dios y el me respondió:

—Muchos me aman a su manera pero yo estoy buscando personas que me busquen como a mí me gusta ser buscado, que me amen como a mí me gusta ser amado.

—Señor yo quiero buscarte cómo quieres ser buscado, quiero aprender a amarte cómo quieres ser amado.
— ¡Perfecto! búscame en el lugar de reposo, quiero pastorearte junto a sus aguas, luego quiero que subas a la montaña para mostrarte el diseño del amor.

Cuéntame, amor de mi *vida,
¿dónde apacientas tus rebaños?,
¿dónde a la hora de la siesta los haces reposar?
¿Por qué he de andar vagando
entre los rebaños de tus amigos?

— ¿A qué te refieres con esto?
—Quiero que dejes ministerio, deja de ministrar, deja de escribir, deja de pensar en otros y pensemos en los dos, deja tus amigos, deja el facebook , deja el pecado a un lado y pasa tiempo conmigo.

Su voz quebranto mi corazón y mis lágrimas rodaron por mi rostro mientras caían sobre mi biblia. Pero si hay un precio por tenerlo estoy dispuesto a pagarlo.Muchos sabemos que no hay un mejor lugar, un mejor tiempo y una mejor opción que estar a solas con Dios pero cuesta demasiado en especial cuándo hacer la obra de Dios y servir a otros es algo que amas con todo tu corazón. ¡Cuán apegados estamos a las cosas de Dios y en hacer cosas para Dios que nos cuesta tanto tiempo quedarnos quietos amando!

Este tiempo (40 días) no fue nada fácil, el camino a aprender a amarlo está lleno de obstáculos, lleno de pruebas y tribulaciones, es un camino que transitas solo (y así te sientes) es un camino en el que caes, te golpeas y no hay quien te ayude a levantarte; debes pararte limpiar tu propia sangre y caminar hasta donde el te enseñara el diseño del amor, el diseño de como quiere el ser amado.

No ha sido fácil pero valió la pena, hoy bajo de la montaña y regreso con algo nuevo de Dios para mi vida y para darlo a conocer a otros. Nunca olvidare que todo empezó con una palabra que me quebranto, y tú ¿Cuándo fue la última vez que lloraste con una palabra?

Moisés volvió entonces del monte. Cuando bajó, traía en sus manos las dos tablas de la ley, las cuales estaban escritas por sus dos lados.
(Éxodo 32:15)

Por: Roverg Giraldo
roveiro.blogspot.com