ESA IMAGEN ME PERSIGUE ¿Por qué no puedo borrar la impureza sexual de mi mente?

ESA IMAGEN ME PERSIGUE
¿Por qué no puedo borrar la impureza sexual de mi mente?

—Le entregue mi vida a Cristo, creo que él me perdono pero tengo en mi mente esas imágenes que me persiguen (Las imágenes de mis citas con la pornografía, y las imágenes de mis encuentros sexuales) me siento tan sucio y tan culpable, llevo años batallando tratando de olvidar pero de vez en cuando vuelven y es entonces que me pregunto si realmente Dios me perdono. ¿Porque esas imágenes no desaparecen de mi mente? ¿Porque no puedo sentirme perdonado?
—Puedo ayudarte en la parte de encontrar el perdón de Dios y de perdonarte a ti mismo pero será inevitable que esas imágenes sigan rondando tu mente.

— ¿Por qué?
—Nuestro cerebro es una supercomputadora que almacena muchísima información; se dice que podemos almacenar cerca de un millón de gigabytes (Cerca de 300 años de programas de televisión ininterrumpidos las 24 horas del día). Aun no se ha encontrado un método de borrar información, algo que sería útil si de borrar nuestro pasado con la impureza se tratara.

No puedes evitar que de vez en cuando esas imágenes vengan a tu mente y más en un mundo tan erotizado en el que nos encontramos. Alguien dijo: “En china es muy difícil el olvidar a alguien que te hirió el corazón porque cada persona que vez te lo recuerda”
Suena chistoso pero es así; cuando el cerebro identifica una imagen o una escena familiar, el procesa la información almacenada y la trae a la actualidad en lo que se conoce como recuerdos por tal razón: no puedes evitar que vengan a tu mente los pensamientos incorrectos pero lo que si puedes hacer es capturar el pensamiento y llevarlo cautivo a la obediencia de cristo. Puedes evitar que tu mente sea una mente impura, te lo voy a explicar de una manera práctica:

Alguna vez alguien en tu página de Facebook te envió un link que era un virus, que al darle clic se reenvió a todos tus contactos?

—Si
—Al darle clic al link estabas abriéndole la puerta a un virus que infecto tu computadora, y además contaminaste otras computadoras, todo habría sido diferente si al ver el link tu no hubieses teclado sobre él. Es inevitable que los links impuros no lleguen a tu mente pero lo que si puedes hacer es no dar clic en ellos deteniéndote a meditar en ellos.

Se dice que un habito de pensamiento no se puede erradicar pero si se puede sustituir por otro, que quiere decir esto:

Que aunque no puedes eliminar tus pensamientos impuros almacenados en tu cerebro, lo que si puedes hacer es que tu mente sea una mente pura, por eso el Apóstol pablo nos dio el secreto de la paz mental:

"Por lo demás, hermanos, todo lo que es verdadero, todo lo honesto, todo lo justo, todo lo puro, todo lo amable, todo lo que es de buen nombre; si hay virtud alguna, si algo digno de alabanza, en esto pensad". (Filipenses 4:8)

Si nuestra mente está ocupada en lo bueno, no tendrá tiempo para que los pensamientos malos ronden nuestra mente, si todo el tiempo este pensado lo bueno no tendrás tiempo para pensar en lo malo. Así que como hombres debemos trabajar en cambiar nuestros hábitos de pensamientos incorrectos por hábitos de pensamiento puros de acuerdo a la palabra de Dios y después de que tu mente se acostumbre a pensar en lo bueno será muy difícil que pienses en lo malo. (Pero recuerda que debes cerrarle los ojos, y los oídos a la impureza sexual para poder pensar en lo bueno, será imposible que esos pensamientos desaparezcan si vemos y escuchamos impureza sexual)

Cuando venga un pensamiento impuro pelea con la palabra de Dios sustitúyelo por uno bueno ármate de versículos bíblicos y cada vez que venga una imagen incorrecta repréndelos, al principio te costara demasiado pero finalmente lograras renovar tus pensamientos. (Créeme a mí me ha funcionado.) Así como buscaste impureza sexual ahora tienes una tarea buscar pureza sexual y aprenderla atravez de aquello que es más puro que el oro acrisolado 7 veces; "la palabra de Dios", todos nosotros podemos llegar a tener la mente de Cristo si tenemos su palabra en nuestra mente y en nuestros corazones.

Porque las armas de nuestra milicia no son carnales, sino poderosas en Dios para la destrucción de fortalezas, derribando argumentos y toda altivez que se levanta contra el conocimiento de Dios, y llevando cautivo todo pensamiento a la obediencia a Cristo. (2 Corintios 10:4-5)

"Mas nosotros tenemos la mente de Cristo". (1corintios 2:16b)

Nota: Mañana trataremos la segunda parte de este tema ¿Cómo sentirme perdonado?

Por: Roverg Giraldo