¿Y SI ENCERRAMOS A DIOS?

¿Y si encerramos a Dios en una habitación, y
si no lo dejamos ir hasta que abra el corazón?
Desnuda el corazón oh Dios,
Háblale a este simple mortal,
Háblame de tus secretos más íntimos,
Ábreme la puertas a tus profundidades.
Perdón por mi egoísmo, muchas veces no te dejo hablar, has tenido que guardarte lo que sientes por escucharme llorar.
Basta ya de mi egoísmo quiero oírte hablar,
Basta ya de pensar en mi mismo, quiero guardar silencio y conocer quien eres en verdad, ¿No se si sea tan confiable? Pero te amo en verdad.
Háblame de lo que odias de mí,
Háblame que quiero cambiar,
Dime como quieres que te sirva,
Dime como quieres que te ame,
Dime donde quieres hallarme,
allí estaré para encontrarte.
"Sino que lo explicaba todo en privado a sus propios discípulos." (Marcos 4:34 b)

No hay comentarios:

Publicar un comentario