Momentos Santos

(Dios de lo cotidiano)

—He intentado pensar en Dios todo el día y me he frustrado, he intentado tener su presencia todo el día conmigo y no lo he logrado ni por medio día la única forma de conectarme con el es cuando estoy en la iglesia y la oración, creo que es imposible me rindo. —Fueron mis palabras durante 4 años, sinceramente lo intente y no lo logre, durante 4 años cometí un error y era tratar de sentir y tener a Dios en mi mente natural.

¿Puede Dios estar en mi día a día, cuando no estoy en la iglesia, en la célula o en mi devocional? ¿Puede estar a mi lado mientras trabajo o estudio, puedo sentir su presencia a mi lado? No estoy hablando de escuchar música góspel todo el día en la empresa o en tu celular, tu yo sabemos que podemos escuchar música o predicaciones que hablan de Dios sin sentir la presencia de Dios, yo hablo de algo más profundo de conectar alma, vida y corazón, pero por sobretodo de conectar nuestro espíritu a la presencia de Dios,

Cuando leemos la biblia descubrimos que Dios apareció a hombres en su día a día, en sus labores cotidianas, (no solo como estamos nosotros acostumbrados en medio de éxtasis espirituales). Puedes imaginar la gente llevando las ofrendas al templo en búsqueda de Dios y Dios en una carpintería tallando madera y construyendo mesas, la gente cantando alabanzas en el templo y Dios dando un paseo en barca con Pedro Jacobo y Juan, puedes imaginar a la gente orando y Dios en el hospital de Bethesda, la gente adorando en el templo y Dios durmiendo en la cama de Lázaro. Los evangelios nos hablan que Jesús iba al templo y a las sinagogas pero la mayor parte del tiempo el la paso en las calles en las casas y en una carpintería.

El mismo Dios que estaba en una carpintería tallando madera puede estar en tu oficina a tu lado frente a una computadora, el mismo Dios que montaba en una barca puede ir montado en tu auto o en el bus mientras regresas del trabajo, el mismo Dios que almorzaba con Martha María y Lázaro es el mismo Dios que puede estar a la hora del almuerzo, el mismo Dios que enseñaba en la sinagoga es el mismo Dios que puede estar en tu universidad contigo, el mismo Dios que estaba en bethesda es el mismo Dios que te acompaña mientras estás en tu turno de hospital. Dios de lo cotidiano, Dios que convierte cualquier momento y cualquier lugar en momentos y lugares santos,

"cualquier momento puede ser un momento santo"

Necesitamos que nuestro chip espiritual sea cambiado y podamos ver a Dios en cualquier lado, aun mientras estas en facebook, chateando o leyendo un excelente blog jajaja, Es posible que en este mismo momento sientas la presencia de Dios mientras lees estas letras después de una sonrisa, tomate unos segundo no importa donde estés, no importa si no terminas de leer este blog, da gracias a Dios por su presencia y siéntelo a tu lado un instante en medio de tu día.

No cometas el mismo error que durante años yo cometí, tratar de atrapar a Dios en tus pensamientos, puedes tener algo mejor que tenerlo en tu mente puedes tenerlo a tu lado.

Ayer hablaba con una amiga por chat y le compartía sobre esta gran verdad y Dios la sorprendió con una visita en su oficina, como el novio a la novia, le llego de sorpresa a su lugar de trabajo y comenzó a llorar, sus compañeros de trabajo se acercaron a preguntarle que le pasaba, ella no supo como decirles que Dios había llegado a su oficina en medio de su trabajo e hizo de su tiempo y de su oficina un momento santo, ella logro descubrir que Dios es un Dios de todo el día no solo del sábado o del domingo, o de la célula, Dios puede llegar en el momento mientras caminas a la tienda a comprar la leche para el desayuno.

Ayer caminaba por la calle me encontré con un anciano con una mano discapacitada pidiendo dinero, apenas lo vi sentí darle algunas monedas, pero medite en mi corazón; si él fuera Jesús no le daría tan solo unas monedas, si Jesús le pudiera dar algo a él le daría más que solo unas monedas, entonces tome la decisión de darle para su almuerzo, no fue mucho pero aprendí que Dios ama aun en lo poco y el anciano descubrió que Dios si responde las oraciones que él hace en la mañana.

No pretendo haberlo ya alcanzado, es mas siento que me hace falta mucho para llegar hasta lo que quiero lograr, pero debo compartir mi experiencia porque sé que hay personas que genuinamente quieren tener a Dios más que unos momentos, talvez ellos descubran que en su día a día hay:

"Momentos santos"

Un día en que Moisés estaba cuidando el rebaño de Jetro, su suegro, que era sacerdote de Madián, llevó las ovejas hasta el otro extremo del desierto y llegó a Horeb, la montaña de Dios. Estando allí, el ángel del Señor se le apareció entre las llamas de una zarza ardiente. (Exodo 3:1-2)

Por: Roverg Giraldo

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