MIGAJAS (Cuando un poco lo es todo)

MIGAJAS
(Cuando un poco lo es todo)

—Ella no me amaba pero me da las migajas de su amor— Fueron las palabras de un joven de 21 años. Yo no la dejaba porque conservaba la esperanza de algún día lograr enamorarla pero en el intento casi pierdo la vida (Intento de suicidio) y aunque ella me daba solo un poco de su amor, para mi ese poco lo era todo.

Cada 15 días salíamos juntos por eso atesoraba en mi corazón cada minuto que pasaba con ella. Ella es tan hermosa que para mí era un regalo del cielo el solo poder tocar su mano,poder tomar a esa hermosa rubia de la mano y llevarla a una cita conmigo me hacía sentir el hombre más feliz del mundo,solo Dios sabe cuán valioso eran para mí un segundo en frente de ella; porque en ese segundo podría darle una mirada a esos hermosos ojos, ojos que me daban un pequeño vistazo a su corazón. Mis amigos pensaban que yo estaba con ella por acostarme con ella pero no era así, yo estaba más interesado en su alma que en su cuerpo. La cita terminaba dejándola en su casa, luego caminaba por las solas y oscuras calles con una sonrisa en el rostro de haber pasado tiempo con ella pero con una tristeza en mi corazón; porque sabía que debería esperar al menos 15 días para volver a disfrutar de las migajas de su amor.

Migajas, tan solo migajas.

¿Alguna vez has tenido tanta hambre como para conformarte con migajas? ¿Alguna vez tu corazón a estado tan vació para aceptar migajas?, ¿alguna vez ha habido tanta necesidad económica como para aceptar un trabajo mal remunerado?, ¿alguna vez has estado tan necesitado de aceptación como para aguantar el bullyng de tus "amigos" aun a costa de tu amor propio?.

Jacinto es un hombre que sufre de Insuficiencia Renal Crónica (No le sirven para nada) tiene diálisis tres veces por semana. El me contó su martirio con la sed:

—A veces siento tanta sed pero no puedo beber mucho líquido, lo que hago es colocar mi mano debajo de la llave y tomar el agua que alcance a recoger en ella, si tomo mas de esta me manda para el hospital antes de tiempo. Cuando lo escuche valore el solo hecho de poder beber toda el agua que quiera.

La biblia también relata la historia de una mujer sobrevivió con unas pocas migajas:

La mujer era griega, y sirofenicia de nación; y le rogaba que echase fuera de su hija al demonio. Pero Jesús le dijo: Deja primero que se sacien los hijos, porque no está bien tomar el pan de los hijos y echarlo a los perrillos. Respondió ella y le dijo: Sí, Señor; pero aun los perrillos, debajo de la mesa, comen de las migajas de los hijos. Entonces le dijo: Por esta palabra, ve; el demonio ha salido de tu hija. (Marcos 7:26-30)

Leyendo esto, mi imaginación voló y pensé que esta fueron las palabras de esta mujer:

—Sí, Señor, pero estoy tan desesperada, tengo tanta hambre por ti, que aun las migajas de tu presencia lograran saciar un poco mi necesidad de ti. Migajas, tan solo migajas saciaran mi corazón de amor por ti y aunque tenga que esperar hasta mi próxima cita contigo, te esperare.

¿Qué tanto necesitas de Dios para saciarte? ¿Qué tanto valoras su presencia en tu vida? No crees que sea momento de que busquemos a Dios más intensamente, ¿porque esperar a ver a alguien con verdadera sed para dar gracias por la saciedad?, ¿porque esperar a ver a alguien mendigando el amor para valorar el amor de Dios?. Qué tal si valoramos cada segundo que el manifiesta su presencia en nuestras devocionales, que tal si valoramos como un regalo del cielo el poder tomarnos de su mano, que tal si valoramos un segundo en nuestro devocional porque ese segundo puede darnos la oportunidad de mirarlo a los ojos y atravez de ellos darle un vistazo a su corazón.

Nota: si hay alguien que ha estado viviendo de las migajas del amor, que tal si escuchas la voz de Dios: —Tú no eres perrillo eres hijo, no te conformes con las migajas, yo te tengo una persona que no te dará las migajas de su amor, te dará todo, rompe con esa relación que te hace daño y espera porque en el tiempo correcto te daré alguien que te amara con todo el corazón.

Y el Espíritu y la Esposa dicen: Ven. Y el que oye, diga: Ven. Y el que tiene sed, venga; y el que quiera, tome del agua de la vida gratuitamente. (Apocalipsis 22:17)

Por: Roverg Giraldo

roveiro.blogspot.com

No hay comentarios:

Publicar un comentario