CUANDO DIOS ME NECESITA(La crisis de Dios)
Todos en algún momento de nuestras vidas pasamos por momentos de crisis, momentos en los cuales la angustia y la desesperación se han apoderado de nosotros, momentos en que nuestro mundo y nuestra alma se desmorona en pedazos, momentos donde lo que más abundan son las lagrimas, todos en algún momento hemos estado en un hospital clamando a Dios por sanidad, frente a un ataúd clamando por una resurrección, todos en algún momento hemos llorado cuando aquel amigo te engaño y se robo nuestro capital, cuando un desgraciado abuso de ti, cuando aquella persona jugó con nuestros sentimientos dejándonos el corazón pisoteado, todos en algún momento nos hemos sentido solos en el momento de mayor vulnerabilidad, cuando el pecado con todo su arsenal ha clavado sus cuchillos en el espíritu dejándonos agonizando en el suelo.
Si algo tiene bueno las crisis es: que descubres quienes verdaderamente están contigo, es en aquellos momentos cuando los que parecían ser tus amigos eran tan solo un espejismo de amistad. Lastimosamente muchos de nosotros atravesamos las crisis como la atravesó Jesús:
Jesús está en su momento de mas angustia porque su vida está corriendo peligro, su corazón late a mil por hora y una mortal angustia comienza a apoderarse poco a poco de él, era su sudor como grandes gotas de sangre que caían al suelo. Es en ese momento que el necesita a aquellos que lo amaban pero lastimosamente, su padre terrenal había fallecido cuando él era un adolescente, sus hermanos estaban ocupados en sus sueños personales y su madre... Su madre no estaba para verlo llorar ante Dios clamando por otra opción, talvez ella si se hubiese compadecido de él, talvez ella se hubiese puesto de rodillas gritando:
— ¡Dios mío, Dios mío, tiene que haber otra opción!
Pero lastimosamente su madre no está a su lado, los únicos que tiene a su lado son los que en los últimos tres años se han convertido en su familia, ellos lo vieron llorar frente a Jerusalén y reír en la casa de Lázaro, lo vieron enojado derribando mesas y lo vieron desmoronarse en la ultima cena ante el anuncio de una traición, esos mismos salieron de esa cena a acompañarlo a un tiempo de oración (a excepción de Judas quien había partido para traicionarlos) pero ninguno de ellos hizo nada, o mejor si hicieron algo:
¡Quedarse dormidos!
Y él se apartó de ellos a distancia como de un tiro de piedra; y puesto de rodillas oró, diciendo: Padre, si quieres, pasa de mí esta copa; pero no se haga mi voluntad, sino la tuya. Y se le apareció un ángel del cielo para fortalecerle. Y estando en agonía, oraba más intensamente; y era su sudor como grandes gotas de sangre que caían hasta la tierra. Cuando se levantó de la oración, y vino a sus discípulos, los halló durmiendo a causa de la tristeza; y les dijo: ¿Por qué dormís? Levantaos, y orad para que no entréis en tentación. (Lucas 22:41-46)
Qué bien la paga a tres años de dedicación; dormir, mientras el creador esta angustiado ellos duermen, mientras su amigo muere en vida ellos descansan, ellos duermen cuando el que los rescato de sus miserables vidas mas los necesita. No te parece que al menos en ese momento, uno de ellos al ver a Jesús angustiado debió haber irrumpido en la conversación de Jesús y el Padre para decirle:
—Señor mi Dios: no te lleves a mi amado, no de esa manera que él nos dijo, al menos déjalo un año más con nosotros, la salvación puede esperar un año más.
¿No te parece que uno de sus discípulos debió haber interrumpido la oración dando un abrazo bien fuerte y permitirle a Jesús llorar sobre su hombro?, pero no; el cuerpo necesita descanso, dormir es la mejor opción y que Jesús salga de su crisis solo.
¿No es lo mismo que nosotros hacemos con Jesús? ¿Todos dormimos en sus crisis?
"Jesús esta clamando por salvación, y los discípulos dormidos"
Yo lo he vivido personalmente: he escuchado el corazón de Dios clamando por salvación por los perdidos y he respondido a ese clamor; me he lanzado y he predicado, he visitado y he anunciado la salvación pero; mis fuerzas lamentablemente en ocasiones no me dan. Mientras tanto mis discípulos, mis discípulos dormidos, ellos ocupados en sus sueños personales pero lastimosamente han dejado el sueño de mi Dios a un lado, ellos duermen mientas Dios está en crisis.
Tal-vez alguno de ellos lea esto que hoy escribo y se sienta mal, (no quiero hacerle sentir así), yo le pido a Dios que ellos despierten de su sueño espiritual y como discípulos estén dispuestos a entregar su vida en servicio a él, que ellos respondan a Dios en la crisis, que cada uno utilice su propio púlpito para predicar porque cada uno de nosotros sin saberlo camina cada día a un servicio o culto en el cual somos los evangelistas y pastores, no en un templo ni una iglesia , cada uno de nosotros tiene su propio auditorio para predicar a diario en el trabajo, en la universidad, en las calles y en las células, oro a Dios que el deseo de salvación corra por nuestras venas, porque lamentablemente aunque muchos de nosotros le servimos a Dios algunos lo hacen por una responsabilidad pero no por responder a la necesidad de Dios.
Talvez atraves de estas letras puedas sentir la crisis que Dios atraviesa por las almas, talvez tu como el ángel tengas el privilegio de fortalecer a Jesús y poner tu hombro para que el llore, talvez tu seas aquel que despierta de su sueño espiritual y no callas esta gran verdad; el corazón de Jesús clama por tu salvación
"Hay muchos líderes que abandonaron su sueño ministerial, porque es un trabajo duro y no remunerado, aquellos lideres no se han dado cuenta que Jesús saldo una deuda que ellos jamás podrían pagar" ¿cuánto crees que costo tu salvación? ¿No crees que Jesús ya te pago lo suficiente?
Por: Roverg Giraldo
roveiro.blogspot.com
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