SEÑORITA DEPRESIÓN

SEÑORITA DEPRESIÓN

(Amarga Compañía)

Cuando todos se van ella aun esta, señorita depresión incondicional en tus momentos de angustia, acertada a la hora de confrontarte con tu realidad. Cuando ella se acerca te lleva a un viaje lejos de tu realidad donde podrán estar apartados de los demás.

Te oprime, te abate y te hace llorar, pero a la vez te consuela con su lastima es como si ella te entendiera:

Sabe escuchar,

Conoce tu dolor,

Conoce tu soledad,

Ella sabe cuando estas triste cuando tus amigos no lo notan,

Conoce cada lágrima que ha mojado tu almohada.

Señorita depresión ha escuchado tus oraciones y ha leído las promesas que te ha hecho Dios, esas mismas promesas que parece nunca se harán realidad.

Señorita depresión te enamora y te seduce,

ella parece una hermosa compañía para toda la vida,

Pero hay un problema:

¡No es tan señorita!

Está casada y profundamente enamorada; su marido es tu peor enemigo; señorita depresión no tiene pudor, y junto con su esposo planean que tengas una vida de horror, quieren tu muerte quieren tu cabeza y harán lo que sea por seducirte:

Sus labios del alcohol besan tu corazón y te embriagan en condenación,

Sus manos de seda tocan tu alma y se llevan tus fuerzas,

Su voz ocupa tu mente, y como el dulce a la diabetes trastorna tu mente.

Señorita depresión te enamora pero te hace sufrir,

Te encadena y te oprime pero te da un poco de su miserable amor,

Te escupe en la cara y te dice que te ama, luego la vez con otro acostada en su cama.

No puedes dejarla porque nadie más te conoce como ella:

Ella ha llorado tus muertos,

ha sufrido tus despechos,

ha sentido tu rechazo al no ser correspondido,

ha visto tus sueños desvanecerse,

te a acompañado a recoger los pedazos de tu alma,

Señorita depresión te dice:

Qué triste te vez,

deberías morirte y así descansar

tal vez nadie lo va a notar.

—Lárgate y muérete

"Pero no te suelta las cadenas que te aferran a la muerte".

Señorita depresión sido compañera de hombres de Dios, e hizo compañía al mismo Señor:

Dios mío, Dios mío, ¿por qué me has desamparado?

¿Por qué estás tan lejos de mi salvación, y de las palabras de mi clamor?

(Salmo 22:1)

Señorita depresión debilito el alma del señor y todo eso fue por mi dolor,

Soltó mis cadenas y las encadeno al alma del Señor, lo sedujo hasta el calvario y como un torero clavo lo estocada.

Hoy veo en la cruz el dolor que me encadenaba,

y a depresión al lado del que me amaba,

¡No puedo evitar llorar!

Como el señor libro mi alma del seol,

¿porque El tomo mi dolor?

Sufrió nuestros dolores; y nosotros le tuvimos por azotado, por herido de Dios y abatido. (Isaias 53:4 b)

Dios mío, clamo de día, y no respondes;

Y de noche, y no hay para mí reposo.

(Salmo 22:2)

Señorita depresión logro su objetivo; llevar a la muerte al mismo señor, y junto con mi dolor descendieron a la muerte.

Señorita depresión no sabía que el mismo señor lograría en tres días lo que yo no pude en toda una vida:

Señorita depresión en la cruz fue derrotada y junto con Satanás ha sido encadenada.

Hoy puedo mirarla a los ojos y gritarle:

—Ya por ti no ciento nada, mira el brillo en mis ojos, es el gozo del Señor que con su muerte arrebato mi dolor.

Este pobre clamó, y le oyó Jehová,

Y lo libró de todas sus angustias.

El ángel de Jehová acampa alrededor de los que le temen,

Y los defiende.

Gustad, y ved que es bueno Jehová;

Dichoso el hombre que confía en él.

(Salmo 34: 6-8)

Por : Roverg Giraldo

Roveiro.blogspot.com