TÚ PUEDES SER LA RESPUESTA A LA ORACIÓN
DE UN DESCONOCIDO
Era el amanecer de domingo, salía de una
velada e iba en el bus rumbo a casa con ganas de dormir, pero algo inquieto mi
corazón, tenía que hablar de Jesús, me puse de pie y hable:
¡Buenos días!
No vengo a vender ningún producto, no
vengo a pedir su dinero, vengo a darles un regalo, una enseñanza
que puede cambiar su vida para siempre, quiero contarles la historia de Jairo;
Él era un hombre al que aparentemente no
le faltaba nada:
Era líder de una sinagoga, tenía una esposa y unos hijos, salud y una posición económica estable, pero una situación afecto trascendentalmente
la vida de Jairo:
La enfermedad de su hija de 12 años
Mientras contaba la historia vi a dos
mujeres llorando una mayor que la otra; su rostro
reflejaba el cansancio y dolor. No me detuve proseguí con mi
historia
Su hija enfermo hasta el punto de
agonizar,
Sus intentos por salvarla parecían vanos,
Ningún medico podía hacer nada,
Sus oraciones parecían no ser escuchadas,
su esperanza se estaba agotando,
Pero de repente le llegan con una noticia:
Jesús está en el pueblo siguiente,
¡Jesús el hombre que tiene fama de
profeta y sanador!
Apenas Jairo se entera que Jesús está
cerca, sale corriendo en busca de su ultima esperanza,
Tan pronto lo ve se arroja a sus pies
llorando y en un clamor que todavía retumba en los cielos dice:
¡¡¡Maestro, Maestro!!!
Mi hija está agonizando pero si tu pones
tu mano sobre ella vivirá,
Jesús accede a su petición y emprenden
camino a la casa de Jairo pero en el camino, se encuentra con una grave noticia
Jairo no molestes más al maestro tu hija lamentablemente
falleció,
Jairo, ni Jesús puede hacer
algo con tu situación,
Jairo ¡no molestes más! hay gente más
importante que tú para Jesús.
Pero Jesús interviene:
Jairo; -No temas solamente cree
Después de tanta oposición llegan a la
casa de Jairo y se encuentran con una escena un poco triste:
Una madre llorando desconsolada,
Unos hijos aferrados a ella llorando,
Vecinos y familiares tratando de consolar,
Y una niña tendida en cama con sus ojos
cerrados,
La niña efectivamente había fallecido.
Más Jesús pronuncia unas palabras:
-La niña no está muerta, esta dormida
"No es lo que hace Dios en nuestras vidas,
ve sueños, ve vida mientras otros ven muerte,
él puede ver esperanza donde nosotros
vemos angustia".
Las risas no se hicieron esperar,
Pero Jesús hizo sacar a todos quedando
solo con los padres de la niña y con tres de sus discípulos; Juan, Jacobo y Pedro, tomo a la niña de la mano y le dijo “talita
cumi”
¡Niña a ti te digo levántate!,
Y al instante la niña despertó de su
sueño,
Asombrados todos daban Gloria a Dios
Puede que tu no tengas unas hija
agonizando pero si tienes;
Un hogar que agoniza,
Unos sentimientos que agonizan,
Un área financiera que se está muriendo,
Sueños personales que están agonizando,
Una soledad en tu alma que hace que tu vida agonice.
Tal vez has al igual que Jairo has hecho
todo y has agotado tus fuerzas tratando de salvarte pero ha sido en vano. Aun no has hecho todo, aun no has buscado
a Jesús; todo en tu vida puede cambiar si tú le pides a Jesús que ponga su mano
sobre tu vida.
Jesús ve vida donde otros ven muerte, ten
la seguridad que si Jesús pone su mano sobre tu vida lo que esta muerte volverá
a vivir.
Cuando termine de hablar no hubo
aplausos solo silencio y unas lágrimas que corrían por el rostro de dos mujeres a las cuales me les acerque;
-¿Puedo ayudarles en algo?
La mujer mayor hablo:
Ella es mi hija y está enferma, hace un
tiempo, los médicos no han podido diagnosticar la enfermedad por tal razón tan
poco han encontrado la cura, y hemos
estado desesperadas, estuvimos “rezando” y pidiéndole a Dios
que si nos escuchaba que por favor nos diera una respuesta, y usted hoy trajo la respuesta.
¿Quieren invitar a Jesús a su vida?
-Si
Con voz entrecortada por el llanto lo
invitaron
Tome la joven de la mano y le dije;
“Talita cumi”, ¡Niña a ti te digo levántate!
Vas a llegar a tu casa y en un mes vas a
leer los 4 evangelios al final del mes habrás conocido a Jesús tu salvador y a Jesús
tu sanador. "Tengo la seguridad de que Jesús la sano".
Una enseñanza me dejo Dios:
"Tú puedes ser la respuesta a la oración
de un desconocido si te atreves a hablar".
Y tomando la mano de la niña, le dijo:
Talita cumi; que traducido es: Niña, a ti te digo, levántate. Y luego la niña
se levantó y andaba, pues tenía doce años. Y se espantaron grandemente.
Marcos
5:41-42
Por: Roverg Giraldo
roveiro.blogspot.com
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