¡PREFIERO LA MUERTE!

                                                     ¡PREFIERO LA MUERTE!

Fueron mis palabras, hace 6 años, no me gusta contar mi pasado no me gusta vivir en él ni traerlo a memoria pero de vez en cuando mi mente me lo recuerda; dos intentos de suicidio frustrados “gracias a Dios”  estan en mi historial.

Todos en alguna ocasión hemos acariciado en la mente la idea del suicidio y hay muchas causas:

-Crisis familiar
-Quiebra económica
-Decepción sentimental
-Perder a alguien que amas
-Crisis escolares
-Abuso sexual
-Entre otras causas

Cuando una crisis golpea el corazón la sensación de los seres humanos es querer escapar en vez de enfrentarlo, y el enemigo les mete la mentira de que la muerte es la solución. Comienzas a pensar que el dolor es insoportable, que la crisis nunca tendrá solución, te encierras en tú cuarto y lloras queriendo dormir y nunca más despertar.

Los niños tampoco se escapan a este tipo de situaciones:

Cuando era un niño de doce años me entere de que una de las vecinas, otra niña de doce años perdió su año escolar y por miedo a ser castigada y golpeada por su padre, tomo el revolver de este y acabo con su vida.

Perder un año no era un motivo para acabar con su vida, “Creo que en eso estarás de acuerdo conmigo”
incluso el castigo de sus padre hubiese sido menor comparado con la muerte, pero es que el suicida  no tiene la perspectiva correcta de la vida, se enfoca tanto en el problema que no puede salir de el,  te lo dice alguien que lo intento.

Hoy miro mi pasado y digo:
La crisis que pensé que nunca terminaría termino,
El dolor que pensé que nunca acabaría se acabo,
La felicidad que pensé que nunca llegaría llego.


Dos años después de mi encuentro con Jesús, el me recordó mi historia y me pregunto:

-¿Qué le dirías a otro hombre que llegue y te diga; yo prefiero la muerte a estar sin ella?

A lo que respondí:

- Señor; que no sea bobo, le contaría mi historia, le diría que todo en esta vida pasa, que tú eres la solución para lo que siente, que si el viento de la crisis lo quiera tirar al suelo, levante sus alas y vuele por encima de la situación, que yo estuve en la misma situación, que aunque está pasando por un momento demasiado difícil, la felicidad llegara aunque no me lo crea.

Esa respuesta está bien para un hombre pero no para mí

-¿Porque?

Porque yo si prefiero la muerte a estar sin ti, esa fue mi última decisión y última palabra.  

Me encontré con este pasaje en la biblia:

Desde entonces comenzó Jesús a declarar a sus discípulos que le era necesario ir a Jerusalén y padecer mucho de los ancianos, de los principales sacerdotes y de los escribas; y ser muerto, y resucitar al tercer día. Entonces Pedro, tomándolo aparte, comenzó a reconvenirle, diciendo: Señor, ten compasión de ti; en ninguna manera esto te acontezca. Pero él, volviéndose, dijo a Pedro: !!Quítate de delante de mí, Satanás!; me eres tropiezo, porque no pones la mira en las cosas de Dios, sino en las de los hombres.
                                                                                                                                    Mateo 16:21-23

Pedro le está diciendo a Jesús:

Ten compasión de ti como de te ocurre morir por roverg, él no lo merece, tú eres demasiado valioso, pero Jesús responde:

-!!Quítate de delante de mí, Satanás, porque yo prefiero la muerte a estar sin él.


Cuando la vida, las crisis y el enemigo te digan que ya no hay solución, aun no has hecho todo aun no lo has intentado todo, te aseguro que si has acariciado la idea del suicidio aun no lo has intentado todo, aun no has entregado tu vida y tu crisis a Jesús, solo pon los ojos en Jesús y escucha su voz diciendo:

-No tienes que hacerlo, yo morí por ti, para que el final de la historia de tú vida tenga un final feliz,
Para cambiar tú luto por oleo de gozo y tú espíritu angustiado por un manto de alegría (Isaias 61)
Aunque creas que no hay solución para tú vida, todo será diferente si me permites entrar en tú vida.


Cuando tu vez a Jesús en la cruz, El te esta diciendo sin palabras:

-"Yo prefiero la muerte a estar sin ti"

Nadie me la quita, sino que yo la doy de mi propia voluntad. Tengo autoridad para darla, y tengo autoridad para tomarla de nuevo. Este mandamiento recibí de mi Padre.
                                                                                                                                        Juan 10:18


Por: Roverg Giraldo
roveiro.blogspot.com


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